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7 de octubre de 2021 | Montemorelos, Nuevo León, México | Brenda Ceron, Laura Marrero y Noticias de la División Interamericana

Una reciente expedición de investigación a la Sierra Madre Occidental, una gran cordillera mayormente volcánica en el noroeste de México, incluyó la recolección de muestras de rocas específicas por parte del científico adventista doctor Luciano González, para ser analizadas en relación con el diluvio registrado en Génesis 6.

El doctor González, que es el director del Instituto de Investigaciones en Geociencia (GRI) de la Iglesia Adventista en Interamérica con sede en la Universidad de Montemorelos, México, dijo que esa excursión fue parte de un proyecto más grande que involucra a grandes porciones de la Cordillera Norteamericana, que se extiende desde Alaska en los Estados Unidos hasta Chile en Sudamérica. El proyecto, que comenzó en 2010, incluye a varios geólogos, bajo la dirección del doctor Benjamin L. Clausen, un geólogo que vive y trabaja en Loma Linda, California.

El doctor Luciano González martilla en parte de la cordillera de la Sierra Madre Occidental en Tepoca, Sonora, México, durante un viaje de investigación del 21 de julio al 4 de agosto. La investigación fue parte de un proyecto mayor de análisis de formaciones de roca que podrían estar conectadas con el diluvio de Génesis 6. [Fotografía: cortesía de Luciano González]

La expedición tuvo lugar del 21 de julio al 4 de agosto, en la que se recolectaron rocas ígneas, o magmáticas de la parte sur del Desierto de Sonora. El viaje fue patrocinado por el GRI y la Universidad de Montemorelos.

Las rocas y su relación con el diluvio

“Creemos que el diluvio fue un evento del cual no conocemos su magnitud exacta”, dijo el doctor González. “La energía de este evento fue capaz de quebrar los continentes existentes, mover las masas continentales, generar grandes corrientes de agua con toneladas de sedimentos que enterraron todo tipo de organismos animales, vegetales, etcétera. El diluvio cambió el relieve terrestre”.

Se cree que las cordilleras montañosas que existen hoy como por ejemplo los Himalayas, los Andes, la Sierra Madre Occidental y la Sierra Madre Oriental, fueron en su mayor parte producto de convulsiones producidas por el diluvio, dijo González. “En esos procesos de hundimiento encontramos organismos fosilizados”, añadió.

Como geólogo de rocas ígneas, el doctor González está interesado en hallar evidencias en los procesos volcánicos. “El diluvio no solamente fue de agua, sino que también incluyó otros procesos tectónicos y orogénicos (formación de montañas) como el magmatismo, que es lo que genera las rocas ígneas”, dijo González. Es por ello que es importante recolectar rocas ígneas para el estudio de la cadena montañosa y su relación con el diluvio.

El doctor Luciano González posa junto a una mina de calcio, cerca de Navojoa, Sonora, México. [Fotografía: cortesía de Luciano González]

Para un estudio de esta magnitud, y debido a la naturaleza de la investigación, los datos relacionados con el tiempo juegan un papel importante, y el estudio de las rocas puede realizar una contribución distintiva.

El doctor González explicó que, por ejemplo, el Golfo de California es una zona con mucha actividad tectónica. “El fondo de este golfo es un centro de separación de continentes, lo que genera, en la placa de la Rivera y otras zonas cercanas, procesos de subducción de corteza terrestre”, dijo. Cuando la corteza oceánica se hunde bajo la Placa Norteamericana que está allí, produce magma que sube y genera montañas graníticas, explicó. Entonces, si se recolectan muestras de rocas ígneas y analiza su contenido mineralógico, se puede tener una idea sobre el tiempo en que se formaron las rocas, cuándo la roca dejó de ser un pedazo de magma espeso o líquido y se endureció. “Estos estudios sobre los procesos de formación de rocas también pueden arrojar información en cuanto al tipo y contenido del agua, lo que también ofrece datos sobre los procesos de alteración mineralógica”, explicó González.

El doctor González logró recolectar 60 kilogramos de rocas en la cordillera de Sonora. Las rocas se encuentran en proceso de ser enviadas a centros de investigación de los Estados Unidos, donde serán sujetas a estudios geoquímicos y geocronológicos, dijo. “La información resultante y la interpretación que se haga serán muy útiles para conocer más sobre la historia de la gran cordillera”, dijo.

Diversidad en la investigación

El proyecto involucra a científicos reconocidos internacionalmente, tanto adventistas como de otras denominaciones, de la Universidad del Sur de California, la Universidad del Estado de California, la Universidad de Loma Linda y la Universidad de Chile.

La esposa del doctor González, Estela Clarke de González, posa frente a un área de diques máficos cerca de Tepoca, Sonora, México. [Fotografía: cortesía de Luciano González]

“El equipo mantiene una interacción dinámica de manera periódica con las diferentes cosmovisiones, lo que enriquece el proceso de investigación”, dijo González.

“Una de las grandes controversias y tema de investigación en este proyecto es en cuanto al tiempo”, dijo. “Los millones de años que postula la geología secular para la vida del planeta contra los seis mil años que aquellos que creemos en la creación postulamos para la vida en la tierra”, dijo el doctor González. Sin embargo, añadió que la diferencia de cosmovisiones entre los investigadores no representa un obstáculo para el desarrollo del proyecto, sino que se basa en las evidencias reunidas en la investigación.

Para continuar con la investigación, los científicos del GRI pronto viajarán a otras regiones de interés, como por ejemplo a la Costa del Pacífico, en especial a las zonas de Mazatlán, Culiacán y Los Mochis, en México, como así también a excursiones al sur de México, en los Estados de Guerrero, Oaxaca y Chiapas.

Trasfondo académico

El doctor Luciano González es egresado de la Universidad de Montemorelos de los programas de Licenciatura en Físico-Matemática, y una Maestría en Educación en el área de Administración. También obtuvo una Maestría en Matemática Aplicada del Centro de Investigación Matemática (CIMAT), en Guanajuato, y un Doctorado en Ciencias de la Tierra con Especialidad en Geología en la Universidad de Loma Linda.

Lisandra Vicente brindó información para esta noticia.

Traducción de Marcos Paseggi

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